Ingredientes
Elaboración
Comenzaremos haciendo una bechamel clarita de la siguiente manera. Se pican los dientes de ajo muy pequeñitos y se fríen a fuego lento. Se reservan con el aceite.
En una sartén grande y que sepamos que no se pega, ponemos una cucharada de mantequilla y se espera a que se derrita. Una vez derretida se añaden dos cucharadas de harina y el aceite reservado. Sin dejar de mover con una cuchara de palo para que no salgan grumos, se va añadiendo poco a poco la leche. Una vez incorporada toda la leche se deja que hierva de 5 a 8 minutos.
Dependiendo de la cantidad de carne que se tenga y de lo espesa que se quiera la bechamel (se recomienda clarita) se añade un poquito más de harina sin dejar de remover. Se añade la sal y la nuez moscada. Si han quedado grumos se puede pasar por la batidora.
A esta bechamel se le añade el puñadito de perejil bien picadito y la carne que sobre de un puchero hecho el día anterior, muy picadita con tijeras de cocina. Se mezcla bien y se pasa a una fuente. Cuando se enfríe la masa se pasa a la nevera y se deja reposar 48 h.
Una vez pasado este tiempo, se les da la forma adecuada y se rebozan pasándolas por huevo y pan rallado. Se fríen hasta que queden doraditas.
- 5 ó 6 dientes de ajo
- 1 litro de leche fría
- La harina que admita
- Un puñadito de sal
- Una pizca de nuez moscada
- Un puñadito de perejil
- La carne del puchero
- Huevo y pan rallado
Elaboración
Comenzaremos haciendo una bechamel clarita de la siguiente manera. Se pican los dientes de ajo muy pequeñitos y se fríen a fuego lento. Se reservan con el aceite.
En una sartén grande y que sepamos que no se pega, ponemos una cucharada de mantequilla y se espera a que se derrita. Una vez derretida se añaden dos cucharadas de harina y el aceite reservado. Sin dejar de mover con una cuchara de palo para que no salgan grumos, se va añadiendo poco a poco la leche. Una vez incorporada toda la leche se deja que hierva de 5 a 8 minutos.
Dependiendo de la cantidad de carne que se tenga y de lo espesa que se quiera la bechamel (se recomienda clarita) se añade un poquito más de harina sin dejar de remover. Se añade la sal y la nuez moscada. Si han quedado grumos se puede pasar por la batidora.
A esta bechamel se le añade el puñadito de perejil bien picadito y la carne que sobre de un puchero hecho el día anterior, muy picadita con tijeras de cocina. Se mezcla bien y se pasa a una fuente. Cuando se enfríe la masa se pasa a la nevera y se deja reposar 48 h.
Una vez pasado este tiempo, se les da la forma adecuada y se rebozan pasándolas por huevo y pan rallado. Se fríen hasta que queden doraditas.
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